Entre la noche del viernes 9 y la madrugada del sábado 10 de febrero se registraron tres homicidios y la incineración de un vehículo en hechos ocurridos en Paz de Ariporo y Hato Corozal al norte de Casanare.
De acuerdo con la información preliminar, todo inició cuando unos sujetos subieron por la fuerza a una joven a un Chevrolet Samurai 1993 de placas DYN-060, al parecer el señor Isidro Naranjo, identificado como vendedor ambulante de medicinas populares, fue testigo de este hecho, por lo que empezó a pedir auxilio, siendo ultimado de un disparo en la espalda.
Posteriormente, con la joven y el vehículo robado, los agresores se dirigieron a Hato Corozal con el expolicía Fabián Abril Fernández, a quien habrían secuestrado tras departir con él en un local comercial por varias horas; en circunstancias que no han sido esclarecidas, Abril Fernández, conocido como «Culebro», habría sido asesinado y su cuerpo fue hallado en la vía con una herida de bala en el pómulo.
En Hato Corozal los sujetos se detuvieron a tomar tinto y presuntamente asesinaron a Héctor José Ballesteros, atendiente del negocio, posiblemente por percatarse que llevaban un cuerpo en la parte trasera del carro.
Según manifestó Dina Nieves Ramírez luego de ser liberada, cuando fue obligada a abordar el vehículo, los sujetos ya tenían amarrado al expolicía en la parte trasera.
Posteriormente, salieron de Paz de Ariporo en dirección a Hato Corozal. En el trayecto, el expolicía logró desamarrarse y forcejeó con el sujeto que lo custodiaba, quien le disparó en la cabeza.
Asimismo, Ramírez indicó que la llevaron para que mostrara la salida del pueblo, pero al manifestar que no la conocía, se toparon con un adulto mayor, a quien le preguntaron por dónde salir de Paz de Ariporo. No obstante, según relató la mujer, el sujeto que iba en la parte de atrás «ya iba como loco» y disparó contra el anciano luego de que este les indicara por dónde salir.
Posteriormente, salieron hacia Hato Corozal, tomaron tinto en un local y el sujeto asesinó al tendero que al parecer se percató de que llevaban una persona en la parte posterior del vehículo; más adelante descargaron el cadáver del expolicía sobre la vía; luego regresaron a Paz de Ariporo y finalmente, incineraron el vehículo en el que se movilizaban, dejaron en libertad a la mujer y emprendieron la huida.
Las autoridades manejan varias versiones sobre lo sucedido, la primera es que se trataría de un hecho de intolerancia y consumo de alcohol; pero la que toma más fuerza es la de un ajuste de cuentas entre miembros de un grupo armado ilegal que opera en la región.
También llama la atención de que al parecer asesinaron a dos personas solo por acercarse a los sujetos y percatarse de lo que estaba sucediendo, pero liberaron a la mujer que estuvo con ellos todo el recorrido.