El diputado Eduardo Antolinez, miembro de la Comisión de Salud de la Asamblea Departamental de Casanare, se pronunció sobre la crítica situación financiera de Capresoca EPS, que afecta a más de 170.000 usuarios.
Durante una intervención reciente, Antolinez explicó que la EPS enfrenta un déficit mensual de aproximadamente 10.000 millones de pesos, una situación que requiere una solución definitiva y no meros paliativos temporales.
El diputado expresó su preocupación por la baja asistencia de otros diputados a las reuniones donde se analiza la situación de Capresoca, haciendo un llamado a la responsabilidad colectiva para resolver la crisis.
Antolinez destacó que la EPS recibe 22.000 millones de pesos al mes, de los cuales 16.000 millones corresponden al régimen subsidiado y 6.000 millones al contributivo, pero su deuda actual asciende a 32.000 millones, lo que ha generado una brecha financiera significativa.
Antolinez subrayó la importancia de trabajar en equipo sin distinciones políticas para encontrar una solución de largo plazo que garantice la estabilidad de Capresoca. Indicó que tanto el gobernador de Casanare como los diputados están buscando alternativas viables para salvar la EPS y mejorar la atención a los usuarios. «Nos dejaron la papa caliente, pero tenemos que encontrar una solución definitiva por el bien de los usuarios», afirmó el diputado.

El diputado rechazó las acusaciones de un supuesto complot para liquidar Capresoca, manifestadas por el sindicato de la entidad en un reciente comunicado. Antolinez aseguró que en sus conversaciones con el gobernador nunca se ha mencionado la intención de acabar con la EPS, sino más bien la búsqueda de soluciones con el Ministerio de Salud y la Superintendencia Nacional de Salud.
Por su parte, la secretaria de salud departamental, Tatiana Chávez, informó que se están realizando gestiones a nivel nacional para mejorar la infraestructura de atención primaria en el departamento. Según Chávez, el Ministerio de Salud ha enviado un equipo técnico que está inspeccionando 74 puestos de salud en Casanare, lo que podría traducirse en mejoras significativas para la atención de los usuarios de Capresoca.
Antolinez concluyó su intervención reiterando su compromiso de seguir trabajando por la salud en Casanare, señalando que, si no se logran avances significativos en las propuestas presentadas para resolver la crisis, está dispuesto a retirarse de su cargo como diputado.