El pasado 8 de septiembre, Carlos Daniel Suárez Mejía, fue cobijado por medida intramural por un juez de control de garantías, luego de haber sido capturado en flagrancia, cuando hurtó alrededor de un millón de pesos en efectivo, amenazando de muerte con un cuchillo a una cajera a quien también hurtó artículos personales.
La captura del delincuente se dio en el momento en que huía del lugar, gracias a la colaboración de la comunidad; la Fiscalía solicitó la medida de aseguramiento, la cual fue acogida por el Juez.
El segundo caso se registró en el municipio de Maní el pasado 5 de septiembre, fue capturado en flagrancia Javier Rafael Parra Barragán, en el barrio El Centro de esta localidad, luego de que, supuestamente, mediante atraco hurtara un teléfono celular.
El 6 de septiembre fue imputado ante un juez con funciones de control de garantías de Aguazul por el delito de hurto, y quien acogió tanto las pruebas de la Fiscalía como sus pretensiones de legalizar su captura y dictar medida restrictiva de la libertad en centro carcelario.