Después de 25 días de angustiosa espera, la joven Dina Julieth Infante Rivera, quien ingresó al Hospital Regional de la Orinoquia (HORO) el pasado 26 de diciembre tras sufrir una grave caída de caballo que le ocasionó una fractura compleja en el codo derecho, finalmente fue remitida para recibir la atención especializada que necesitaba con urgencia.
Según el diagnóstico inicial, la paciente requería un lavado quirúrgico y tratamiento ortopédico en un centro de mayor complejidad. Sin embargo, la remisión se retrasó debido a la falta de convenio entre el HORO y la EPS Famisanar, situación que generó un deterioro progresivo en la salud de Dina Julieth, quien comenzó a perder la movilidad de los dedos en su mano afectada.
La espera prolongada provocó que la familia de Dina Julieth realizara llamados desesperados a la EPS y a la Superintendencia de Salud, con el apoyo de periodistas y figuras locales que visibilizaron el caso.
Gracias a la intervención de Nueva EPS en Casanare, la paciente fue finalmente aceptada en el Hospital Universitario Clínica San Rafael. La madre de Dina Julieth expresó su gratitud con un emotivo mensaje:
«Hoy quiero dar gracias a Dios, a los periodistas que estuvieron pendientes de la remisión de mi familiar y a Gerardo Jiménez por la gestión que nos ayudó a hacer ante el hospital para la aceptación de la paciente.»
Este caso es un ejemplo claro de las dificultades que enfrentan muchas familias en Colombia para garantizar una atención médica oportuna, especialmente cuando los trámites administrativos demoran intervenciones que son críticas para preservar la salud y la calidad de vida de los pacientes.