
La Procuraduría General de la Nación ha dictado una sanción disciplinaria contra la coronel (r) Sandra Yaneth Mora Morales, quien se desempeñó como comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta. La decisión, fechada el 15 de agosto de 2025, implica la suspensión e inhabilitación del ejercicio de funciones públicas por un periodo de doce meses, en cumplimiento de lo estipulado en la Ley 2196 de 2022.
La investigación de la Procuraduría corroboró que la excomandante incurrió en faltas graves contra una patrullera subalterna, a quien maltrató verbal y físicamente. Se estableció que la oficial, durante su tiempo en uniforme, empleó expresiones ofensivas y ejerció violencia física y verbal, vulnerando así la normativa disciplinaria interna de la Policía Nacional, específicamente el artículo 46-3 del Estatuto Disciplinario. Esta conducta fue calificada como falta grave cometida con dolo, exigiendo una respuesta en el ámbito disciplinario.
Al determinar la sanción, se aplicó el principio de proporcionalidad, considerando un atenuante y dos agravantes en el proceso. La coronel (r) Mora Morales, quien actualmente ocupa el cargo de secretaria de gobierno en el municipio de Los Patios, en Norte de Santander, ha interpuesto un recurso de apelación que será evaluado por la Sala Ordinaria de Juzgamiento de la Procuraduría General de la Nación.
El caso de la patrullera, identificada como “Carolina”, se remonta a la noche del 6 de febrero de 2024. Según un relato publicado por el sargento retirado Alexander Chala Saénz, la coronel atacó física y verbalmente a la patrullera, quien cumplía funciones de Coes (prensa) y la acompañaba en sus actividades diarias. Estos hechos habrían sido motivados por la filtración de una fotografía que mostraba a la oficial entregando anchetas, presuntamente adquiridas con dineros de la Metropolitana de Cúcuta, a empresarios como Arbey Duque. El incidente ocurrió en las instalaciones del Comando, en presencia de varios uniformados, incluyendo al Mayor secretario privado del General Región 5, quien tuvo que intervenir para detener el maltrato.
La patrullera agredida fue trasladada a Sanidad y quedó incapacitada, presentando un estado de crisis, ansiedad y parálisis facial en parte de su rostro. La denuncia formal fue radicada el 7 de febrero de 2024, a través del portal Transaccional de la Policía Nacional. Días después del incidente, la patrullera recibió llamadas de la teniente Sandra Ardila Gómez, secretaria privada de la coronel Mora, quien intentó interceder, argumentando que lo sucedido fue un «momento de rabia» y sugiriendo retirar la denuncia a cambio de un puesto cómodo y continuidad en la unidad para su ascenso. Incluso, la víctima fue citada en un lugar público por un capitán, comandante jurídico, quien llegó con la propia victimaria para presionar psicológicamente a la funcionaria para que retirara la denuncia.
Además del caso de maltrato, la coronel retirada ha sido señalada por varios funcionarios de ser una persona «grosera, maltratadora y poco humana».
Es relevante mencionar que la coronel Sandra Mora es conocida públicamente por su orientación sexual lesbiana y por ser una defensora de la inclusión en la fuerza pública, habiendo sido entrevistada en plataformas de defensa de derechos de la población sexualmente diversa.