
La nochea de este 20 de agosto de 2025, el sector de El Pajonal en el Parque de la Iguana de Yopal fue escenario de un devastador incidente que dejó a decenas de personas en condición de calle sin sus escasas pertenencias y sus improvisados refugios.
Estos habitantes, un grupo conformado por aproximadamente 22 o 23 individuos, denunciaron haber sido atacados por personas que, según sus testimonios, vestían uniformes similares a los de la Policía Nacional. Lo ocurrido marcó un trágico epílogo a una jornada diurna en la que funcionarios públicos habían intentado aliviar su precaria situación.


Los «cambuches» y «habitáculos» provisionales, que para estos individuos representaban su único amparo, fueron sistemáticamente incendiados durante la noche. Un residente afectado relató con dolor que no solo sus refugios fueron reducidos a cenizas, sino también la totalidad de los bienes que les habían sido entregados apenas unas horas antes.
La asistencia recibida de la administración municipal y la gobernación incluía comida, ropa, útiles de aseo y mercado, elementos esenciales que ahora se perdieron en las llamas. Un testigo describió que el fuego no fue provocado por un simple fósforo, sino que se utilizó gasolina para asegurar la destrucción total.
La vulnerabilidad de esta comunidad es profunda. Entre los afectados se encuentran personas con graves problemas de salud, como un individuo que padece cáncer intestinal y, debido a su discapacidad, requiere permanecer recostado la mayor parte del tiempo. Otro caso mencionado es el de personas con tuberculosis, cuya situación de salud ya estaba siendo atendida por entidades municipales y departamentales.
Asimismo, el grupo incluye personas de la tercera edad y ciudadanos que intentan ganarse la vida honradamente a través del reciclaje, recuperando plásticos y otros materiales desechados.
Más allá de la pérdida material, las denuncias incluyen agresiones físicas directas. Algunos afectados manifestaron haber sido golpeados con palos y piedras, resultando lastimados y lesionados. Un hombre con discapacidad indicó que tuvo que mostrar su condición a un Intendente para evitar ser agredido.
Otro testimonio describe cómo los jóvenes son atacados, incluso por su intento de subsistir a través de actividades como el reciclaje. Este ataque no es un hecho aislado; los habitantes de calle señalaron que ya han sido víctimas de incidentes similares en repetidas ocasiones, siendo esta la cuarta vez que enfrentan una situación de esta magnitud.
Hasta el momento de la publicación, las autoridades no habían emitido un pronunciamiento oficial sobre lo sucedido, aunque un representante de la alcaldía municipal había expresado su preocupación y se había desplazado al lugar para verificar lo ocurrido. La incertidumbre y la desolación se apoderaron de ellos, quienes ahora se preguntan dónde encontrarán un lugar seguro para pasar la noche.