Según la información que entregaron sus acompañantes a la policía, se tomó el pecho y se desplomó, falleciendo casi que de forma instantánea.
Pedro Díaz Lozano junto a varios amigos más se habían internado en zona boscosa de la vereda La Porfía en Yopal, en busca de cazar algún animal silvestre para consumir su carne durante la celebración de noche buena.
En esta travesía, sufrió lo que sería un infarto, que terminó con su vida en el lugar donde se encontraba cazando, sus compañeros dieron aviso a las autoridades y tuvieron que esperar varias horas junto al cuerpo hasta la llegada de las autoridades.
En el lugar uniformados de la Policía realizaron la inspección técnica y el levantamiento del cuerpo, para poderlo trasladar fue necesario improvisar una hamaca y ser cargado por sus compañeros hasta el lugar donde habian podido ingresar los vehículo
Pedro Díaz Lozano, era habitante del asentamiento Mi Nueva Esperanza de Yopal, padre de dos niñas. El cuerpo fue trasladado hasta medición legal donde se determinará la causa de la muerte.

