Los vecinos del barrio Los Héroes de Yopal se despertaron esta madrugada por un fuerte ruido y un nauseabundo olor. Se trataba de dos vehículos de la empresa EAAAY que realizaron un transborde de basuras en plena calle a las 2 de la madrugada.
Esta actividad dejó en evidencia varias situaciones: la primera, la falta de dotación de los operarios que recogen la basura; la segunda, la ausencia total de elementos de protección personal; y el manejo inapropiado que se le está dando al tema de las basuras en Yopal por parte de la agente interventora Judy Estela Velásquez, pues es evidente que esos operarios no están capacitados para realizar esta difícil e importante labor.



Evidentemente, no era ni el lugar ni el horario adecuado para transbordar las basuras de los vehículos satélites a los carros compactadores, pues no solo el fuerte olor y el ruido incomodaron a los vecinos del sector, sino que los lixiviados que quedaron esparcidos en el lugar seguirán afectándolos durante horas o días.
Es importante dejar claro que, en caso de que un operario se llegue a lesionar o por cualquier motivo demande a la empresa por enfermedad laboral, serán los yopaleños quienes tengan que asumir ese gasto con aumento en el valor de las facturas.
Valdría la pena revisar el tema salarial y contractual de estos operarios, pues si no les han dado dotación, no es descabellado pensar que también haya problemas con el pago de sus sueldos.
Igualmente, se recibieron denuncias ciudadanas desde el sector de Llano Lindo, donde los vecinos denuncian que hace una semana no se recogen las basuras de este sector. Los fuertes olores ya han comenzado a afectar la salud de los residentes, pues este problema con las basuras se suma al casi inexistente servicio de agua potable, que está llevando a la comunidad cerca del punto de ebullición.


El silencio de la agente interventora, con la complacencia de la Superintendencia de Servicios Públicos, es reflejo de la incompetencia o la mala voluntad con la que se está manejando la empresa desde que fue tomada por asalto por el ente interventor, y lejos de mejorar, el servicio que presta es cada vez más deficiente.
El informe entregado meses atrás por la Superintendencia de Servicios Públicos, donde intentó justificar la intervención, no convenció a nadie; dicho sea de paso, gran parte de la culpa de lo que está sucediendo es de los sindicatos de la empresa, pues fueron ellos los que imploraron por la intervención (en plena época electoral).
En resumen, los operarios deben laborar en las condiciones que les impongan, pues es apenas lógico que intenten proteger su puesto de trabajo, aunque esto no los disculpa por hacer transbordos en sitios y horarios inadecuados; pero en última instancia, el verdadero afectado es el usuario final que no recibe un servicio adecuado y la factura cada vez más costosa.