“La señora está en shock, ella no puede hablar y que, de malas, que miren a ver qué van a hacer”, fue la respuesta que recibió la familia de Cipriano Higuera de 63 años, un maestro de construcción que falleció el pasado 28 de mayo en la clínica Casanare, donde fue remitido luego de haber sido arrollado por una camioneta en la carrera 40 con calle 30 de Yopal.
Siendo las 8 de la mañana del 28 de mayo, Cipriano Higuera, en compañía de su ayudante de nombre David Franco, se desplazaban en una motocicleta cuando una camioneta marca Suzuki de placas MXW192, conducida por una mujer, los enviste causándoles lesiones.
Como ya es costumbre en Yopal, la ambulancia tardó más de 40 minutos en llegar y los funcionarios de tránsito nunca llegaron al lugar a atender el caso, por lo tanto, cada quien retiró los vehículos y los lesionados fueron remitidos al centro asistencial.
Manifiestan los familiares de Cipriano Higuera, que la dama que conducía el vehículo los acompañó hasta la clínica Casanare, pero que minutos después desapareció y que al momento de tratar de comunicarse con ella en el número de contacto que había suministrado, fue cuando recibieron esta desafortunada respuesta de parte de los familiares de ella.
“Estamos como familia, pidiéndole a la señora encarecidamente que se presente con los documentos ya que mi tío, no contaba con un seguro y está siendo tratado como una persona particular, la hemos llamado, la hemos buscado, pero no quiere acercarse” era la súplica que elevaba Johana González, sobrina de la víctima, buscando que la autora del accidente se responsabilizara de sus actos.
Se pudo establecer que horas más tarde del fallecimiento de Cipriano, una persona que al parecer representaba a esta señora, contactó a los familiares para realizar todos los trámites necesarios.
Llama fuertemente la atención que, ante la deficiencia de los servicios de ambulancia en Yopal, se suma la falta de presencia, sobre todo los fines de semana, de los funcionarios de la Secretaría de Movilidad, además que aun Yopal no cuenta con un parqueadero autorizado para la recepción de los vehículos involucrados en accidentes de tránsito.
En entrevista con el subcomandante de los agentes de tránsito, este manifestó que nunca les fue reportado este evento, aunque testigos de los hechos manifestaron que una patrulla de la Policía estuvo en el lugar, lo que es extraño, es que la central de emergencias no informara a los agentes competentes para atender este accidente.