La inseguridad en Yopal ha dejado un saldo trágico en los últimos días con el asesinato de dos mujeres en hechos aislados que han generado conmoción en la comunidad. Las autoridades han prestado especial atención a estos casos debido a las circunstancias en las que ocurrieron y ofrecieron una recompensa de hasta 10 millones de pesos por información que conduzca a la captura de los responsables.
El primer caso involucra a Carmen Lucely Bueno Oreo, quien fue asesinada en medio de un atraco. Sujetos armados le arrebataron la vida, lo que ha generado indignación entre los habitantes de Yopal. El secretario de Gobierno departamental, Julio Ramos, reiteró la recompensa y solicitó la colaboración ciudadana para esclarecer este crimen.
En otro hecho, Johana Rondón Quintana fue encontrada desmembrada, con partes de su cuerpo abandonadas en distintos puntos de la ciudad. Según las autoridades, este caso podría estar vinculado a retaliaciones por microtráfico, ya que la mujer tenía antecedentes judiciales. Además, se investiga la posible desaparición del hijo de Rondón, de quien no se ha tenido información desde el crimen. La policía señaló que no hay evidencia de que el niño haya sido trasladado a Yopal, aunque vecinos de la víctima afirman haberla visto acompañada del menor.
Un tercer caso, aunque sin ofrecimiento de recompensa, también mantiene en alerta a las autoridades. Ángela Patricia Salas Ruiz, una joven de 22 años, desapareció en septiembre, y aunque las investigaciones sugieren que su compañero sentimental, conocido como «Vitamina», podría estar involucrado en su desaparición o asesinato, otra hipótesis apunta a que podría estar siendo instrumentalizada por una red de trata de personas. Hasta el momento, las autoridades no han encontrado ninguna pista que ayude a esclarecer su paradero.
Estos casos han encendido las alarmas sobre el creciente nivel de violencia en la región, y las autoridades instaron a la ciudadanía a colaborar para frenar la ola de criminalidad.