El tranquilo entorno del Parque El Resurgimiento de Yopal se vio sacudido por momentos de terror el pasado domingo, 10 de septiembre, alrededor de las 4:30 de la tarde, en ese momento, varias familias que disfrutaban de una tarde de esparcimiento vivieron momentos de angustia cuando dos individuos a bordo de una motocicleta abrieron fuego indiscriminadamente contra un grupo de jóvenes que se encontraba cerca del escenario conocido como la tarima.
Según los testigos presenciales, lo que comenzó como un enfrentamiento entre alrededor de 10 jóvenes, quienes se arrojaban botellas y piedras, tomó un giro trágico cuando los dos individuos en la motocicleta respondieron con disparos de arma de fuego, lo más alarmante de esta situación es que este violento episodio se desarrolló en un lugar público, sin considerar la gran cantidad de niños y adultos que se encontraban en el parque en ese momento.
«La gente corría, los niños gritaban atemorizados por los disparos», relató uno de los testigos, quien presenció la escena de horror. Inmediatamente después de los disparos, unidades de la Policía se desplegaron en el lugar, dando inicio a una persecución contra los individuos responsables, sin embargo, hasta el momento se desconoce si se logró la captura de los agresores.
El incidente quedó registrado en las cámaras de seguridad del sector, donde se observa a dos hombres en una motocicleta deteniéndose frente a la tarima. Uno de ellos desciende y apunta su arma hacia las personas que se encontraban junto al escenario.
Durante meses, los residentes del área han estado denunciando que el Parque El Resurgimiento se ha convertido en un refugio para habitantes de calle, indígenas y un punto de encuentro para traficantes de drogas que operan con impunidad desde el parque lineal de Caño Seco, ubicado a una cuadra de la Alcaldía de Yopal y del Departamento de Policía de Casanare.
En respuesta a esta situación, los residentes están exigiendo un operativo urgente en la zona, así como la implementación efectiva de políticas públicas dirigidas a la infancia y a las personas en situación de calle, la comunidad espera que estas medidas contribuyan a prevenir que tanto el parque lineal como El Resurgimiento sigan siendo invadidos por elementos delictivos, garantizando la seguridad y el bienestar de todos los ciudadanos que visitan este espacio público.