
Un informe técnico preliminar, gestado por la Fundación Little Guardians, ha desvelado lo que parecen ser graves irregularidades en el avalúo catastral urbano que rige entre los años 2024 y 2025.
Las conclusiones, basadas en información oficial de la alcaldía y CATASIG, la cual fue obtenida luego de una acción de tutela que ganó la fundación, ya que se negaban a suministrar los informes, sugieren entre otras cosas, una aplicación desigual de los criterios técnicos que podría estar afectando desproporcionadamente a los ciudadanos de menor capacidad económica.
Los hallazgos son, cuando menos, alarmantes. La Fundación identificó incrementos promedio que superan con creces lo esperado en los estratos socioeconómicos más vulnerables.

Por ejemplo, en el estrato 3, se observó un aumento promedio del 366.4%, mientras que en el estrato 2, el incremento alcanzó el 233.3%. Incluso en el estrato 0, el alza fue del 207.8%, y en el estrato 1, del 191.2%.
Estos sectores, donde cada peso cuenta, no solo enfrentaron subidas exorbitantes sino también una extrema variabilidad, evidenciada por desviaciones estándar que llegaron hasta ±1.881 en el estrato 1.
Es un contraste marcado con el estrato 5, de alta capacidad económica, donde los aumentos se mantuvieron en un 69% y la dispersión fue mínima, apenas ±0.43. Esto dibuja un cuadro de inequidad en la aplicación de las normativas.
Adicionalmente, el análisis técnico preliminar arrojó luz sobre serias fallas en el modelo de valoración catastral mismo.
Se documentaron incrementos de hasta el 231.784% en predios que no presentaban ninguna justificación física para tales valorizaciones; del mismo modo, se encontraron disminuciones injustificadas superiores al 99% y la presencia de códigos catastrales duplicados.
Un detalle particularmente llamativo es que se registraron avalúos positivos en propiedades que carecían tanto de área construida como de terreno. La relación entre el incremento del avalúo y las características físicas de los predios, como el área del terreno (con una correlación de r=0.003) o el área construida (con r=-0.001), resultó ser prácticamente nula, lo que pone en entredicho la lógica subyacente al modelo de valoración. La desconexión entre el avalúo de 2024 y el de 2025, con una correlación muy baja (r=0.126), sugiere una ruptura metodológica, indicando que algo fundamental cambió en la manera de tasar.
Lo que significa simplemente que le asignaron aumentos a predios que no tienen construcciones y que la forma de calcularlos cambió radicalmente entre 2024 y 2025 sin una explicación clara por parte de CATASIG.
Todo esto fortalece la advertencia sobre una carga fiscal desproporcionada que recae sobre los hombros de los hogares más vulnerables.
En definitiva, el sistema catastral urbano de Yopal muestra preocupantes debilidades en equidad, coherencia y continuidad técnica.
La Fundación Little Guardians recalca la necesidad urgente de una auditoría y una revisión estructural profunda del modelo de actualización catastral, con el fin de devolver la justicia tributaria y la confianza a los ciudadanos.
Este es un informe preliminar, y se espera que el informe completo sea presentado a las autoridades en los próximos días.