Esa es la percepción de los estudiantes del plantel educativo de Yopal, quienes hicieron un llamado a las entidades correspondientes para que el colegio cuente con el servicio de vigilancia.
Largo tiempo completa ya la institución educativa sin este esencial servicio, lo que llevó a algunos líderes estudiantiles a hacer visible esta situación, que los expone a ellos como estudiantes y al cuerpo docente, administrativo y directivo del colegio, ya que se encuentran ubicados en una zona roja en el mapa de las autoridades en hechos delictivos.
Al colegio se puede ingresar sin ningún inconveniente, ya que sin vigilancia no hay quien esté pendiente de la puerta de acceso, además de la delincuencia, en el sector es frecuente ver el consumo y comercialización de estupefacientes, y estas personas podrían acceder cuando lo deseen a la institución para distribuir este tipo de sustancias.
En las instalaciones del Megacolegio existen cámaras de seguridad, pero no son suficientes para el control que se requiere, los líderes estudiantiles junto a las directivas del colegio han hecho reiteradas solicitudes escritas al gobierno municipal y al ministerio de educación, para que les den alguna solución a esta problemática.
Sin embargo, la respuesta ha sido siempre la misma, no hay recursos económicos para contratar el servicio de vigilancia, por parte del Ministerio, tan solo se remiten a direccionar las peticiones a la alcaldía municipal y personería, lo que conlleva a que continúen con la misma problemática.
Padres de familia han hecho el ejercicio de ingresar a la institución y recorrerla sin ningún tipo de impedimento y señalan que eso mismo podrían hacer los delincuentes, los expendedores o incluso personas con intenciones de hacer daño a algún estudiante o docente. Les preocupa que una vez finalice el año lectivo, las instalaciones quedan solas, a merced de los ladrones.
Otra problemática que visibilizan los líderes estudiantiles, son las constantes riñas que se forman a la salida del colegio por cuenta de jóvenes consumidores que llegan a generar conflicto, sin que haya una presencia constantes de la policía, lo que pone aún más en riesgo la integridad de los estudiantes.
También son constantes las amenazas contra alumnos y docentes de la institución por denuncias del consumo y comercialización de estupefacientes en los alrededores del colegio.
Para el próximo año les anunciaron que tan solo contarán con el servicio 172 días, por lo que siguen haciendo el llamado a quienes corresponda para buscar una solución que les brinde tranquilidad a la hora de recibir sus clases y evite llegar a una situación que lamentar.