
La Secretaría General de Interpol aprobó y publicó una notificación roja contra César Manrique Soacha, quien fuera director del Departamento Administrativo de la Función Pública.
Esta decisión llegó después de que la Fiscalía General de la Nación elevara la solicitud formal casi un mes despues de que fuera emitida la orden de captura, actuando a través de la Oficina Central Nacional (OCN) de Interpol Colombia.
La medida busca hacer efectiva una orden de captura que pesa sobre Manrique Soacha, emitida por un juzgado tras imponerle una medida de aseguramiento en centro carcelario el pasado 29 de julio.
El panorama para Manrique dio un giro inesperado en cuestión de días. Durante meses, asistió a las diligencias judiciales en su contra, disipando cualquier sombra de duda sobre una posible evasión. Sin embargo, todo cambió abruptamente el 29 de julio; desde aquel día, su paradero se convirtió en un misterio.
Las citaciones judiciales quedaron sin respuesta y su rastro se perdió por completo. La Fiscalía ha sostenido que, a raíz de esta decisión judicial, el exfuncionario dejó de responder, y no existe registro oficial de su salida del país en las bases de Migración Colombia. Tampoco ha vuelto a conectarse de manera virtual a las audiencias, lo que encendió todas las alarmas en el ente acusador.
Frente a esta “enigmática ausencia”, la Fiscalía lo considera ahora un prófugo más dentro del escándalo de corrupción que ha sacudido al Gobierno del presidente Petro. La solicitud de la circular roja se fundamentó en el argumento de que, al no comparecer después de la medida de aseguramiento, Manrique representa un riesgo de fuga y podría entorpecer la justicia en el proceso por la supuesta apropiación irregular de recursos públicos vinculados a contratos de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).
Por el momento, ni la Fiscalía ni la Policía Nacional tienen información precisa sobre su ubicación, ni existen pruebas oficiales que confirmen que haya abandonado el país.
Sin embargo, su ausencia en las diligencias judiciales lo sitúa en una ruta ya conocida por otros exfuncionarios que han optado por el refugio en el extranjero para eludir a la justicia. Cabe recordar que, aunque una circular roja de Interpol es una herramienta poderosa, no garantiza una captura automática, pues cada país decide, según su legislación interna, si procede o no a la detención.
De otra parte, la Fiscalía informó que está a la espera de la respuesta de Interpol a la solicitud de notificación roja contra el exdirector del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República (Dapre), Carlos Ramón González, que fue radicada el pasado 4 de julio, luego del la polémica por la supuesta colaboración de miembros de la Cancillería para que lograra huír hacia Nicaragua, donde ahora se encuentra en calidad de refugiado político bajo la protección de la Dictadura de Ortega.