La interrupción del servicio de Claro, la empresa de telecomunicaciones líder en Colombia, durante varias horas el 23 de diciembre, causó un significativo impacto en la Región de la Orinoquía, específicamente en los departamentos de Arauca, Casanare y Vichada. La afectación, confirmada por autoridades locales, repercutió en aproximadamente 500,000 habitantes de esta área.
La jornada del 23 de diciembre, caracterizada por una intensa actividad comercial y financiera, se vio paralizada por la interrupción del servicio de Claro, empresas, tanto grandes como pequeñas, que dependen en gran medida de las transacciones en línea y las comunicaciones, se vieron afectadas, repercutiendo en las cifras de ventas y movimientos comerciales.
La falta de servicio también afectó los procesos de empalme de administraciones regionales en la Región de la Orinoquía, interrumpiendo las operaciones comerciales y empresariales que dependen de la conectividad en línea.
La respuesta oficial por parte de Claro para entender la causa de esta interrupción se recibió a través de un escueto comunicado donde aducen a los actos de vandalismo la interrupción del servicio, sin puntualizar más datos sobre el tema.
El sector empresarial y comercial experimentó una detención significativa debido a la interrupción de Claro; empresarios están a la espera de información sobre cómo serán compensados por las pérdidas millonarias sufridas en un día de alta actividad económica.
La empresa de telecomunicaciones ha sido objeto de críticas constantes por interrupciones, cortes y caídas de red, aunque cobra puntualmente a los usuarios, los problemas recurrentes afectan gravemente a una de las empresas de servicios más grandes del país.
Los hechos que llevaron a esta interrupción parecen estar vinculados a actos de vandalismo en la troncal de fibra óptica, dejando sin servicio a los departamentos de Casanare, Arauca y Vichada. Técnicos de Claro trabajaron para restablecer el servicio, pero los daños generaron un apagón para aproximadamente 500,000 habitantes.
Los actos vandálicos ocurrieron en dos sitios, y las investigaciones apuntan hacia personas que conocen el sistema de fibra óptica de Claro. Hasta el momento, la empresa no ha emitido un comunicado oficial sobre este incidente.