La Fiscalía General de la Nación judicializó a Carmen María Acosta Martínez y Nazario Murray Cabrera por su presunta participación en actividades delictivas en los municipios de Hato Corozal y Villanueva, Casanare. Ambos enfrentan imputaciones por delitos como secuestro extorsivo, hurto agravado, extorsión y porte ilegal de armas.
Acosta Martínez fue detenida el pasado 29 de julio por la Policía Nacional, tras existir una orden judicial en su contra. Se le acusa de participar en una extorsión cometida el 31 de marzo en Hato Corozal, donde se habría exigido a un hombre el pago de 120 millones de pesos, bajo amenazas realizadas en nombre del frente 10 de las FARC.
Por su parte, Nazario Murray Cabrera fue capturado en Villanueva mientras recibía una importante suma de dinero, presuntamente relacionada con una extorsión atribuida al Clan del Golfo. Los hechos ocurrieron el 17 de julio en una finca rural de Tauramena, donde se habría exigido al administrador 35.000 pesos por cada hectárea sembrada de arroz.
Ambos procesados negaron su responsabilidad en los delitos imputados y fueron asegurados en un centro carcelario mientras continúan las investigaciones.