El Juzgado Tercero Administrativo del Circuito de Yopal declaró la nulidad de la Resolución del 28 de junio de 2018 de la Alcaldía de Yopal, mediante la cual se otorgó licencia de construcción para la Planta de Beneficio Animal «Frontino» a nombre de Julián Renato Parra Gómez, acto que se firmó en el gobierno de Leonardo Puentes, el cual insistió el entonces burgomaestre en avanzar con este proyecto, pese a las advertencias de algunos líderes que insistieron en su momento, en la inconveniencia de adelantar este proyecto en ese sector.
En su fallo de primera instancia, el juez Mauricio Andrés Pérez Caballero determinó que, al expedir dicha licencia, el Municipio de Yopal no tuvo en cuenta el verdadero uso de suelo requerido para el desarrollo de actividades propias de una planta de beneficio animal. Además, el solicitante no presentó los estudios de tránsito necesarios, considerando que este tipo de construcciones se catalogan como de alto impacto.
La decisión se fundamentó en que la zona donde se ubicaría el proyecto correspondía a áreas de producción agropecuaria, mas no agroindustriales, como lo exigía la actividad proyectada. Asimismo, el predio no se encontraba dentro del polígono industrial de Araguaney, área dispuesta para este tipo de proyectos según el Plan de Ordenamiento Territorial vigente.
El fallo indicó que, al momento de otorgar la licencia, no se condicionó la presentación de estudios de tránsito requeridos para construcciones de alto impacto, pasando por alto dicho requisito de forma irregular.
La demanda fue interpuesta por Oromario Avella Ballesteros, quien alegó que la licencia desconoció normas urbanísticas y ambientales al no contar con la aprobación de la autoridad ambiental competente, como lo exigía el concepto de uso de suelo expedido previamente.
Algunos expertos consultados por el tema, coinciden en afirmar que esta sentencia podría llevar a la administración municipal a incurrir en una demanda que podría comprometer una gran parte del presupuesto, pues los propietarios han invertido una suma importante y los daños y perjuicios que reclamarían superarían con creces el presupuesto anual del municipio.
Habría que considerar el desarrollo que una empresa como esta traería para la región, los empleos directos e indirectos que generarían, los beneficios económicos que traería para el sector ganadero, el cual fue certificado por el mismo FEDEGAN; proyectos que ha recibido el apoyo de todos los gobernantes, tante municipales como departamentales, es algo que valdría la pena tener en cuenta.
Ya es costumbre de algunos lideres y activistas, escarbar los recovecos jurídicos de los grandes proyectos de la región, muchos de los cuales se hacen necesarios para el desarrollo de Yopal y Casanare, como el terminal de transportes que ya estaba a punto de iniciar las obras, la nueva panta de tratamiento de aguas residuales, la cual iba a ser trasladada y ampliada como algunas otras que, muy probablemente movidos por celos políticos, mas que por la necesidad de proteger el erario público, son demandadas y suspendidas por jueces de la república.