La Administración Departamental de Casanare, liderada por César Ortiz Zorro, ha implementado un plan de contingencia para enfrentar la escasez de agua que afecta a comunidades campesinas en el departamento.
La respuesta incluye la distribución de agua mediante carrotanques en localidades como Hato Corozal, Támara y Paz de Ariporo.

Durante los meses de noviembre y diciembre del año anterior, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) construyó más de 50 abrevaderos en diferentes zonas del departamento, como medida preventiva ante la sequía, estos abrevaderos han fortalecido los espejos de agua y contribuido a mitigar los riesgos para la fauna local, especialmente los chigüiros.
En el marco de la contingencia actual, más de 10 veredas, incluyendo San Rafael, La Capilla, La Maraure, Altagracia, Casa Roja, Las Mercedes, Camelias y La Veremos en Hato Corozal; El Tablón, Cruz Verde y La Victoria en Támara; y el centro poblado de Caño Chiquito en Paz de Ariporo, están siendo atendidas con la distribución de agua a través de carrotanques.
Guillermo Velandia, director Departamental de Gestión del Riesgo de Desastres, destacó la importancia de brindar apoyo a los campesinos en estos momentos críticos, subrayó que el servicio de agua mediante carrotanques es gestionado por funcionarios oficiales de la Gobernación, sin incurrir en recursos adicionales a través de contratos.

A pesar de los puntos críticos por sequía en Caño Chiquito y Centro Gaitán, donde históricamente se ha registrado riesgo para la fauna, hasta la fecha no se han reportado situaciones especiales.
Esto se atribuye a las acciones preventivas realizadas por la UNGRD a finales del año pasado, que contribuyeron a garantizar el abastecimiento de agua para uso doméstico y proteger a la fauna local.
La distribución de agua mediante carrotanques asegura el acceso a este recurso vital en comunidades afectadas por la sequía.