Después de varias horas de diálogo entre representantes del gremio y la administración municipal, se llegaron a acuerdos que permitieron sobre la 8 p.m. levantar los bloqueos.
Desde tempranas horas de este lunes 06 de febrero un gran número de taxistas que apoyaban la manifestación se ubicaron en diferentes puntos claves para la movilidad y obstaculizaron el tránsito vehicular, en exigencia a ser escuchados para presentar las problemáticas que aquejan al gremio y como respuesta a las recientes declaraciones del Secretario de Movilidad Orlando Cruz y el alcalde Luis Eduardo Castro.
Diferentes grupos se ubicaron en las salidas de la capital, impidiendo el tránsito fluido de vehículos sobre la Marginal del Llano; permitiendo el paso tan solo por algunos minutos. También bloquearon el ingreso hacia el aeropuerto El Alcaraván, las instalaciones del parqueadero y oficinas de Setty, la Alcaldía y un grupo realizaba recorridos en plan tortuga.
La difícil situación de movilidad llevó a que se instalará por parte de la administración municipal un Puesto de Mando Unificado – PMU en el que se evaluaron las condiciones junto a la fuerza pública y demás entidades e instituciones comprometidas y se hizo el llamado a los voceros del gremio amarillo para sentarse a dialogar.
Después de más de cuatro horas de encuentro se llegaron a acuerdos que permitieron que se retornara a la normalidad, logrando los taxistas el principal objetivo del cese de actividades, que era lo relacionado con la expedición de la tarjeta de operación sin la exigencia del pago de seguridad social.
Que, aunque es un tema de normatividad nacional y no es de resorte local, se dará una espera mientras se eleva la solicitud también al gobierno central y se adelantan las mesas de trabajo entre la Alcaldía y los taxistas, las cuales se retomarán a partir del miércoles 8 de febrero.
Según los voceros se obtuvo respuesta a cada una de las problemáticas planteadas y se inicia a trabajar en ellas con delegados de la administración para ponerlas en firme, dentro de lo acordado, hace parte un borrón y cuenta nueva respecto a todo lo expresado en redes sociales y en ruedas de prensa por las dos partes.