
El Tribunal Administrativo de Casanare admitió la demanda de pérdida de investidura contra el diputado Wilder Ávila, quien enfrenta acusaciones por presuntamente vulnerar el régimen de conflictos de intereses.
La controversia surgió por su participación activa en la discusión y votación de una recusación que él mismo presentó contra Marisela Duarte.
Ávila, con experiencia política como exconcejal y expresidente del Concejo de Maní, conocía los protocolos para este tipo de procedimientos. Su actuación en este caso particular generó cuestionamientos sobre el respeto a las normas de conflicto de interés que rigen a los funcionarios públicos.
De confirmarse las irregularidades y prosperar la demanda, su curul en la Asamblea Departamental sería ocupada por el joven Mateo Tarquino, lo que abriría espacio para la representación juvenil en este órgano de decisión departamental.

