
El departamento de Casanare enfrenta una grave crisis ambiental debido a la intensificación de los incendios forestales, especialmente en Paz de Ariporo, municipio que actualmente se encuentra en alerta roja. Según la Gobernación de Casanare, más de 3.500 hectáreas de vegetación han sido arrasadas por las llamas, afectando cultivos, pastizales y hábitats de fauna silvestre.
Uno de los incendios de mayor magnitud se registra en la vereda La Libertad, donde Bomberos Voluntarios trabajan desde el 10 de marzo en labores de control y extinción del fuego. Sin embargo, las condiciones climáticas y la vegetación seca han dificultado las labores, lo que ha llevado a una rápida propagación de las llamas.

El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM) mantiene el nivel de alerta roja en Paz de Ariporo, mientras que los municipios de Hato Corozal, Nunchía, San Luis de Palenque y Trinidad están en alerta naranja. Por su parte, Villanueva y Yopal permanecen en alerta amarilla, lo que indica un alto riesgo de incendios en estas zonas.
Desde la Dirección de Gestión del Riesgo de Desastres, la Gobernación ha intensificado la campaña #CasanareSinPirómanos, con el propósito de crear conciencia sobre los impactos de los incendios y fomentar la denuncia de quienes provocan estas emergencias ambientales. Las líneas habilitadas para reportar estos delitos son: 122 de la Fiscalía, 123 de la Policía y el 3108186137 de Corporinoquia.
Los incendios forestales alteran los ecosistemas, reducen la biodiversidad y afectan el equilibrio ambiental. La quema indiscriminada de vegetación provoca la destrucción de hábitats naturales, obligando a especies silvestres a desplazarse, lo que incrementa el riesgo de extinción de algunas de ellas. Además, la pérdida de cobertura vegetal contribuye a la erosión del suelo, disminuye la capacidad de retención de agua y agrava los efectos del cambio climático.
Las autoridades han reiterado el llamado a la comunidad para evitar acciones que puedan desencadenar incendios, como la quema de basuras o la realización de fogatas en zonas vulnerables. Asimismo, han insistido en la importancia de denunciar cualquier acto sospechoso relacionado con incendios intencionales.