La desaparición, secuestro y posterior homicidio del reconocido ganadero y líder social Néstor Barón, en Paz de Ariporo, continúa siendo un caso que clama por justicia y esclarecimiento.
Más de ocho meses después del hallazgo de su cuerpo en una fosa común, la incertidumbre sobre los responsables y las circunstancias de su asesinato persiste.
El 6 de mayo de 2024, Barón salió desde su residencia en el barrio Los Centauros hacia su finca en la vereda La Arenosa, pero nunca llegó a su destino. En ese trayecto, fue interceptado por desconocidos que, según las primeras investigaciones, realizaron exigencias económicas a su familia, tratándose aparentemente de un secuestro extorsivo.
Pese a los esfuerzos de búsqueda, que incluyeron el pago de 40 millones de pesos por parte de los familiares a los captores, el desenlace fue trágico. El 17 de julio, su cuerpo fue encontrado sepultado en una fosa, a escasos 300 metros de donde habría sido secuestrado. La identificación oficial y el sepelio se realizaron en octubre.
En las últimas horas, han surgido rumores sobre la captura en Yopal de un hombre que podría estar relacionado con el crimen como presunto autor material. Sin embargo, las autoridades han mantenido completo hermetismo sobre el caso.
De manera extraoficial, se ha insinuado que personas cercanas al ganadero podrían tener algún vínculo con los hechos, lo que incrementa la complejidad de la investigación.
Néstor Barón, recordado por su liderazgo en el sector agropecuario, su compromiso como presidente comunal y gestor cultural, sigue siendo una figura que marcó profundamente a su comunidad. Su muerte ha generado gran consternación y un clamor unánime por justicia.