El número de familias con afectación en sus viviendas, enseres, cultivos y animales de corral, aumentaron durante este fin de semana debido a las fuertes precipitaciones.
En los municipios de Villanueva, Maní, Tauramena, Sabanalarga, Aguazul, Chámeza, Recetor, Yopal, Nunchía, Pore, Trinidad, San Luis de Palenque y Hato Corozal, se presentaron mayormente las afectaciones a vías y familias.
En este sentido, se realizó un Consejo Departamental de Gestión del Riesgo ampliado con alcaldes municipales, en donde se conocieron las principales necesidades y se establecieron acciones concretas para atender a las familias damnificadas, de acuerdo al nivel de cada emergencia.
Hacia el municipio de Villanueva, se trasladaron ayudas humanitarias para prestar el auxilio a 150 hogares afectados por inundaciones en sus viviendas y predios en las veredas Horquetón, El Encanto, Caracolí, Buenos Aires, Puerto Rosales, entre otras comunidades afectadas por el desbordamiento de los ríos Túa y Upía.
Estas últimas ayudas humanitarias se suman a las entregadas recientemente, en donde se atendieron 130 familias afectadas durante otra emergencia.
En Yopal se presentó afectación en la vía hacia el corregimiento La Chaparrera, tras una visita de Gestión del Riesgo e Infraestructura del Gobierno Departamental, se coordinó con empresas privadas la habilitación de la vía. Igualmente resultaron inundadas varias veredas por los desbordamientos de los ríos Charte, Cravo Sur y caño Usivar.
Al respecto, Gestión del Riesgo en cabeza de Arvey Méndez, el Cuerpo de Bomberos Voluntarios y Alcaldía Municipal iniciaron el trabajo del censo de afectación. Las ayudas se estarán entregando según el cronograma establecido, este martes.
Mientras tanto, hacia la vereda La Manga se desplazó un carrotanque que ha estado surtiendo de agua potable a decenas de familias con desabastecimiento del vital líquido por afectación en los puntos y fuentes de captación.
Una de las mayores afectaciones se registra en el municipio de Sabanalarga, en donde hubo pérdida de banca dejando incomunicadas unas 5 veredas de esta población, evento originado por socavación de la quebrada La Piñalera. En el punto se realizará una visita técnica para determinar qué obras correctivas se deben construir.
En los municipios de Maní, Tauramena, Aguazul, Chámeza, Recetor, Nunchía, Pore, Trinidad, San Luis de Palenque y Hato Corozal, la cifra de damnificados aún no se ha determinado; los organismos de socorro y las oficinas de Gestión del Riesgo en cada municipio trabajan en la caracterización de los hogares con pérdidas económicas.
“Afortunadamente el Gobernador, dispone de un importante banco de ayudas humanitarias, con las cuales se puede apoyar a los municipios en la respuesta a las emergencias. Lo único que hemos pedido es la realización juiciosa de los censos, con sus respectivas fotos de visitas y afectación, firmas de damnificados y organismos de socorro, para llegar a quienes verdaderamente han tenido alguna afectación por esta fuerte temporada de lluvias”, explicó el director de Gestión del Riesgo Arvey Méndez.