
Un juez de conocimiento impuso una condena superior a una década de prisión contra Carlos Alberto Rivas Blanco, hallado responsable de cometer un acto sexual violento agravado en perjuicio de una mujer en Yopal, Casanare. La sentencia, emitida el 1 de octubre de 2025, fue el resultado de un preacuerdo y de las pruebas contundentes presentadas por la Fiscalía General de la Nación.
Los hechos que llevaron a esta condena se remontan al 25 de junio del mismo año. La investigación judicial logró establecer que Rivas Blanco concertó un encuentro íntimo con la víctima en un hotel de la ciudad de Yopal.
Sin embargo, la situación tomó un giro violento cuando la mujer intentó retirarse del lugar. Fue en ese momento que el hoy condenado la intimidó blandiendo un arma cortopunzante y procedió a agredirla sexualmente en contra de su voluntad.

Tras el proceso legal, el juez sentenció a Carlos Alberto Rivas Blanco a una pena de 10 años y 4 meses de prisión, la cual deberá ser cumplida de manera efectiva en un establecimiento carcelario. La condena no se limita solo a la privación de la libertad. Como parte adicional de la sanción, el condenado fue inhabilitado para el ejercicio de derechos y funciones públicas por el mismo periodo, una medida que busca apartarlo de posibles posiciones de autoridad.
Es importante precisar que esta sentencia se encuentra en etapa de primera instancia. Esto significa que, de conformidad con el procedimiento penal colombiano, la decisión no es definitiva y se encuentra sujeta a los recursos de ley que puedan interponerse en su contra. El caso, por lo tanto, podría ser revisado por una instancia judicial superior.
La Fiscalía destacó el valor de la víctima durante el proceso y el papel fundamental de las pruebas recolectadas para alcanzar este resultado condenatorio. El fallo representa un significante avance en un caso que conmocionó a la comunidad yopalena, subrayando el rigor del sistema judicial frente a delitos de alta gravedad.