
Paula Osorio, una mujer de 30 años con cinco meses de gestación y un embarazo catalogado como de alto riesgo, falleció el pasado 15 de marzo en el Hospital de Maní tras sufrir un colapso mientras asistía a una consulta ambulatoria.
Según testigos, la paciente acudió al centro asistencial para reclamar unos exámenes médicos. Durante la consulta, la médica que la atendió le tomó la tensión y determinó que estaba elevada, por lo que procedió a inyectarle un medicamento. Segundos después, la mujer comenzó a convulsionar y perdió la vida en el lugar.
RED-SALUD Casanare confirmó el deceso y aseguró que, al detectar una emergencia hipertensiva, el personal médico activó los protocolos correspondientes. No obstante, pese a los esfuerzos, su evolución fue desfavorable.
La Secretaría Departamental de Salud informó que se inició una investigación clínica y epidemiológica para esclarecer las causas del fallecimiento. Mientras tanto, familiares y allegados han solicitado que el caso sea revisado a profundidad.
Este suceso ocurre pocos días después de la colocación de la primera piedra para la construcción del nuevo hospital de Maní, proyecto en el que se invertirán más de 17 mil millones de pesos.
