El Instituto Nacional de Vías (Invías) ha puesto en servicio la variante Los Grillos, una nueva infraestructura que reabre el corredor Sogamoso – Aguazul con una inversión que supera los $15.000 millones.
Esta iniciativa, ejecutada en menos de cuatro meses, se erige como un paso crucial para restablecer la comunicación terrestre entre los departamentos de Boyacá y Casanare a través de la Transversal del Cusiana.
La variante, con una longitud de 515 metros, presenta un ancho de calzada de 5 metros y cuenta con dos puentes metálicos tipo Bailey de 50 m y 30 m de extensión, permitiendo el tránsito de vehículos de carga con un peso de hasta 52 toneladas.
Aunque la vía admite vehículos a un solo carril, incluyendo los de carga pesada, aquellos con carga extra dimensionada o extrapesada estarán sujetos a restricciones, y la velocidad máxima será de 20 km por hora.
Los estudios y diseños, previamente aprobados por la intervención, respaldaron la construcción de la vía, que se extendió a lo largo de aproximadamente cuatro meses, enfrentando desafíos climáticos y de seguridad en el sector, la nueva estructura de pavimento se diseñó con materiales aligerados para evitar incrementar la carga en la ladera inestable.
Esta apertura de la variante Los Grillos es la respuesta del gobierno del Cambio a las dificultades enfrentadas por los habitantes de Boyacá y Casanare. Cerrada inicialmente por el deterioro del estribo del puente Quebrada Negra en agosto y posteriormente por el colapso del puente de Los Grillos en noviembre, esta infraestructura forma parte de un viaducto que incluye Puente Nuevo y Chorroblanco, sometidos a monitoreo constante por parte del Invías.
Además de la variante, el Invías completó las obras de estabilización en el kilómetro 87, afectado en noviembre de 2021 por la pérdida de banca.
Se implementó un sistema de terrazas de 10 niveles con obras de drenaje, garantizando la estabilidad del talud superior y facilitando el tránsito en la calzada recientemente pavimentada.