
El Gobierno del presidente Gustavo Petro anunció la implementación de un plan de transformación social y económica para la región del Catatumbo, en el departamento de Norte de Santander, zona fronteriza con Venezuela afectada por la violencia y el narcotráfico.
La estrategia, enmarcada en el estado de conmoción interior vigente desde enero, contempló una inversión de 2.7 billones de pesos (aproximadamente 670 millones de dólares). El objetivo central fue abordar problemáticas como la erradicación de cultivos ilícitos, el desplazamiento forzado y la falta de infraestructura.

Uno de los ejes principales del plan fue la erradicación de 25.000 hectáreas de cultivos de hoja de coca, representando la mitad de las plantaciones en la región, mediante un esquema de pagos por erradicación voluntaria. Los campesinos recibieron un pago mensual de $1.280.000 durante un año, mientras se desarrollaron alternativas económicas legales. Además, el Gobierno planeó titular las tierras recuperadas a favor de los campesinos.
La mejora de la infraestructura fue otro componente clave. La ministra de Transporte, María Fernanda Rojas, anunció una inversión de 240.000 millones de pesos para la construcción de la Transversal del Catatumbo, una vía destinada a conectar la región con el resto del país. En el ámbito educativo, el Ministerio de Educación solicitó 387.000 millones de pesos para fortalecer la infraestructura y la oferta educativa, incluyendo la construcción de colegios y una sede universitaria en El Tarra.
El Departamento de Prosperidad Social destinó 42.000 millones de pesos para atender a 3.654 hogares en los municipios de Ábrego, El Tarra y Tibú. Se realizaron transferencias económicas a 38.237 adultos mayores, incluyendo indígenas y migrantes. Los recursos para este plan provinieron de impuestos excepcionales decretados en el marco de la conmoción interior.
En cuanto a la seguridad, la región del Catatumbo enfrenta una grave crisis humanitaria, con enfrentamientos entre el ELN y disidencias de las Farc que dejaron cerca de una centena de muertos y más de 50.000 desplazados desde el 16 de enero. El presidente Petro denunció que el ELN expulsó a miles de personas de zonas cultivadoras de coca. Ante esta situación, el Gobierno suspendió los diálogos de paz con el ELN y ordenó a las fuerzas militares recuperar el control de la frontera.
El presidente Petro anunció medidas para el Plan Catatumbo que incluyeron la sustitución voluntaria de hoja de coca, la producción lícita, vías para la comercialización y un proceso de paz en la región. El mandatario aseguró que se erradicaron 25 mil hectáreas de hoja de coca y se emprendió un programa de cultivos lícitos, así como la construcción de vías para comercializar los productos.