El presidente Gustavo Petro solicitó la renuncia de Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda, en medio de acusaciones relacionadas con la entrega de cupos indicativos a congresistas y posibles irregularidades en contratos de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).
A través de un mensaje en su cuenta oficial de X, Petro afirmó que no considera a Bonilla culpable, pero busca proteger el programa de gobierno de presiones y ataques que, según el mandatario, buscan desestabilizar su administración.
La solicitud de renuncia coincide con declaraciones ante la Fiscalía de María Alejandra Benavides, exasesora del Ministerio de Hacienda, quien vinculó a Bonilla en un entramado que involucraría la autorización de contactos y contratos en las regiones.
Además, Bonilla denunció a Nicolás Alcocer, hijo de la primera dama, y a Ricardo Roa, presidente de Ecopetrol, por supuestas presiones indebidas relacionadas con contratos de energía solar en la empresa hidroeléctrica Urrá.
Entre los involucrados en este escándalo, destacan los exdirectivos de la UNGRD, Olmedo López y Sneyder Pinilla, actualmente encarcelados por su participación en la trama de corrupción.
El caso ha generado un fuerte debate político, sumado a investigaciones de la Procuraduría liderada por Margarita Cabello, que anunció la revisión de las denuncias y los testimonios que comprometen al ministro.
Con este anuncio, la administración de Petro enfrenta otro momento de tensión que pone en el foco la transparencia y la gestión de su gobierno frente a los casos de corrupción.