la alcaldía de Marco Tulio Ruiz, inicia el desmantelamiento de la empresa SETTY, disposición judicial a la que venían haciéndole el quite desde hace meses.
El pasado 2 de noviembre, la empresa concesionaria SETTY cerró sus operaciones de manera definitiva en Yopal, tras una orden judicial del Tribunal Administrativo. Esta disposición, emitida luego de una disputa legal de casi una década, declaró ilegal el proceso de concesión que dio origen a la compañía, creada durante las administraciones de Willman Celemín y Jorge García para gestionar los servicios de tránsito en el municipio.
Hace algunas semanas, luego del fallo definitivo, SETTY comenzó el desmonte de sus operaciones, incluyendo el retiro de equipos, suspensión de servicios y cambios de personal. La dirección de la liquidación quedó en manos de Liliana Barrera, quien liderará el cierre total de la entidad.
A partir del lunes pasado, la Secretaría de Movilidad asumió directamente los trámites y servicios que antes gestionaba SETTY. Para garantizar la continuidad, se implementó un convenio temporal con el Sistema Integrado de Información sobre Multas y Sanciones por Infracciones de Tránsito (SIMIT), ante las limitaciones de infraestructura de la Secretaría.
Además, se anunció el traslado de las oficinas a un nuevo edificio, cuyo contrato de arrendamiento está en proceso de perfeccionamiento.
El cierre de SETTY marca un punto final a una concesión polémica y abre la posibilidad de una mayor burocracia en la administración municipal. Este cambio, bajo la actual gestión del alcalde Marco Tulio Ruiz, genera cuestionamientos sobre el impacto en el manejo del recaudo y los posibles costos administrativos adicionales para los contribuyentes de Yopal.
La transición plantea retos significativos en términos de eficiencia operativa y transparencia, aspectos que deberán ser monitoreados por las autoridades y la ciudadan