
Dos adolescentes bajo custodia del Centro de Atención Especializada Kairos en Yopal protagonizaron un nuevo episodio de violencia el pasado jueves que terminó en fuga.
Los menores, descritos por fuentes internas como reincidentes actores recurrentes, uno de Yopal y otro de Villavicencio, no solo escaparon por la entrada principal, sino que antes sustrajeron celulares y dinero en efectivo al personal administrativo.
El incidente ocurrió durante un amotinamiento que, según versiones extraoficiales, no fue controlado a tiempo por los cuidadores. Uno de los fugados se entregó voluntariamente el pasado miércoles, mientras que el otro presuntamente habría viajado a Villavicencio tras enterarse del asesinato de un hermano.
Este caso revela problemas estructurales en el centro operado por la empresa Corpofe, quienes tienen el contrato de la administración de Kairos, pues también se supo que un menor viene solicitando el traslado a otro centor, ya que ha sido amenazado de muerte por otros menores internos, pero al parecer su denuncia no ha sido escuchada..
Trabajadores que pidieron reserva de identidad denunciaron condiciones laborales precarias y fallas en el servicio. «Nos pagan menos de lo legal y la seguridad es casi nula… Acá mandan mas los internos que los cuidadores, con la complicidad de uno de los sicólogos», manifestó uno de ellos.
Expertos señalan que Kairos se ha convertido en una «bomba de tiempo» que requiere intervención inmediata del ICBF, directo responsable de este centro, pero que según los denunciantes, parece que no le interesa en lo más mínimo, pese a las reiteradas denuncias sobre esta institución.
Mientras tanto, familias y trabajadores esperan que por fin se realice una auditoría seria que destape la realidad de este polémico centro.