La Empresa de Acueducto, Alcantarillado y Aseo de Yopal (EAAAY) enfrenta una de las peores crisis en su historia un año de una catastrófica intervención por parte de la Superintendencia de Servicios Públicos.
Lo que comenzó con un déficit de 7.000 millones de pesos al momento de la intervención, ahora, según auditorías recientes, ha escalado a 17.000 millones, aumentando las dudas sobre la viabilidad de esta empresa.
El alcalde de Yopal, Marco Tulio Ruiz, no ocultó su preocupación y afirmó que “fue peor el remedio que la enfermedad”. Además, reveló su intención de crear una nueva empresa de servicios públicos municipales ante la insostenible situación de la EAAAY.
Según explicó, los activos con que cuenta la empresa actualmente, pertenecen al municipio, lo que permitiría evaluar la viabilidad legal de esta propuesta, que se está consultando con su equipo jurídico para sentar las bases de la creación de la nueva empresa, que abarcaría también el área rural.
Ruiz señaló que, a pesar de haber establecido una hoja de ruta con el anterior superintendente para la devolución de la empresa al municipio, los avances se han detenido con el cambio de funcionario. Indicó que esperará hasta febrero del próximo año para obtener respuestas definitivas de la Superintendencia. De no recibir una solución, el mandatario procederá a la creación de una nueva entidad de servicios públicos bajo el principio de libre competencia.
La intervención, que inició con la designación de Judy Estella Velásquez como agente especial, dejó proyectos sin terminar y una deuda en ascenso. Entre las obras inconclusas se encuentran sistemas de acueducto en Quebrada, Punto Nuevo, La Guajilla y Marroquín, entre otras, que siguen pendientes debido a la falta de gestión y la imposibilidad de la Administración Municipal de ayudar, debido a la intervención de la empresa.
Aunque recientemente se nombró a Ángela Patricia Rojas Combariza como nueva agente interventora, su designación no genera optimismo entre los sectores afectados, dado su historial en la administración pública.
Un verdadero caso de “Justicia poética”, es el rol de los sindicatos de la EAAAY, que, según algunos observadores, fueron responsables en buena medida de la intervención inicial y, aunque ahora buscan desligarse de la crisis y presumen de haber impulsado la salida de Velásquez, las verdaderas razones estarían relacionadas con una citación a control político promovida por la congresista Sonia Bernal.
Es decir que el cambio de la dirección de la empresa se dio como una “Jugadita” de la Superservicios, para evitar ser desnudada su incompetencia y el debacle al que han llevado a la empresa, condenándola probablemente a su cierre total.
Por su parte, el alcalde Marco Tulio Ruiz cuestionó la falta de avances y calificó las gestiones de la Superintendencia como insuficientes para salvar una empresa que parece estar en su “fase terminal”.
La situación actual no solo evidencia fallas administrativas, sino que plantea serias dudas sobre la intervención como estrategia para resolver los problemas de la EAAAY, teniendo en cuenta que en la anterior intervención, propiciada también por los sindicatos, Luz Amanda Camacho Sánchez quien era la agente interventora de ese entonces, al parecer convirtió la empresa en su caja menor y estaría siendo investigada por invertir recursos de la empresa para la campaña a la alcaldía del exalcalde Leonardo Puentes, proceso que pese al tiempo que lleva no ha arrojado ningún resultado.